Quién puede negar la existencia de Dios al observar el mar. Pero no creo que Dios tenga equipos o clubes selectos. Eso ya es cuestión del ser humano. Los cambios de religión (sea por convicción o una crisis existencial) te lleva a adaptarse a un estilo de vida que este acorde con tus expectativas.
Como que no es tan fácil que digamos, es un vuelco total. Y ahí vamos, cuidando la salud física, mental y espiritual. Eso sí, fuera de todo: "Dar gracias a Dios en todo instante. Y disculparse por lo egoísta que uno puede llegar a ser."
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